La salsa bechamel es una de las bases de la cocina clásica, versátil y deliciosa. Su textura suave y cremosa la convierte en la compañera ideal para cubrir lasañas, gratinar verduras o preparar croquetas. En esta receta te voy a enseñar diferentes tipos de bechamel según el uso que le quieras dar: una más ligera para gratinar o napar, otra más densa para croquetas secas (como jamón o cecina) y otra aún más cremosa para croquetas húmedas (como de marisco, boletos o gambas). Te voy a dar todos los tips que yo sé para que consigas siempre la textura perfecta y un sabor exquisito. Además, si quieres una versión más ligera, puedes sustituir la mantequilla por aceite sin perder cremosidad.
¿Sabías que…?
La bechamel es una de las salsas madre de la cocina francesa y su nombre proviene de Louis de Béchameil, mayordomo del Rey Luis XIV. Según su densidad, puede convertirse en la base de infinidad de recetas: gratinados, croquetas, pasteles salados o incluso salsas derivadas como la Mornay.
Beneficios nutricionales
- Fuente de calcio: elaborada con leche, fortalece huesos y dientes.
- Energía equilibrada: la combinación de grasa y carbohidratos aporta energía prolongada.
- Versátil: sirve como base para gratinados, pastas o masas de croquetas, aumentando el valor nutricional de tus recetas.
Ingredientes según uso
Para gratinar o napar:
- 90 g de mantequilla o aceite
- 90 g de harina
- 1 litro de leche
- Nuez moscada al gusto
- Sal y pimienta al gusto
Para croquetas “secas” (jamón, cecina, etc.):
- 120 g de mantequilla o aceite
- 120 g de harina
- 1 litro de leche
- Nuez moscada al gusto
- Sal y pimienta al gusto
Para croquetas “húmedas” (marisco, boletos, gambas, etc.):
- 150 g de mantequilla o aceite
- 150 g de harina
- 1 litro de leche
- Nuez moscada al gusto
- Sal y pimienta al gusto
Elaboración tradicional
- Derrite la grasa (mantequilla o aceite) en un cazo a fuego medio, cuidando que no se queme.
- Añade la harina y tuéstala suavemente durante 4–5 minutos, removiendo constantemente hasta formar un roux homogéneo.
- Vierte la leche de golpe y mezcla bien con unas varillas para evitar grumos.
- Añade nuez moscada, sal y pimienta al gusto. Cocina a fuego medio removiendo frecuentemente hasta alcanzar la textura deseada: más ligera para gratinar o napar, más espesa para croquetas.
- Ajusta el tiempo de cocción según la densidad necesaria:
- Gratinados o napar: bechamel fluida, cocción más corta.
- Croquetas secas: cocción media, textura firme.
- Croquetas húmedas: cocción más prolongada, textura muy cremosa.
Elaboración Thermomix
- Coloca la grasa en el vaso y programa 3–4 min/120 °C/velocidad 2.
- Añade la harina y tuesta 4–5 min/120 °C/velocidad 2.
- Vierte la leche, nuez moscada, sal y pimienta, y cocina 12–15 min/120 °C/velocidad 2, ajustando según la densidad que necesites.