Esta primavera nos fuimos de vacaciones a la ciudad eterna, Roma, y allí, cerca de la piazza Navona descubrimos un pequeño local, el Two Sizes, con unas colas muy largas para comprar, así que nos pusimos a cotillear para ver qué vendían, de esta forma descubrimos el misterio, eran tiramisús de diferentes sabores a destacar este el tiramisú de pistacho, y aunque yo no los he probado todos, se dice que estos son los mejores de la ciudad, desde luego lo que sí sé, es que crean adicción.😋😋
Accesorios
- Bol multifunción
- Varillas
Ingredientes
- 4 yemas de huevo
- 2 claras de huevo
- 110 gr. azúcar
- 120 gr. pistachos pelados
- 450 gr. queso mascarpone
- 1 café intenso y frío
- 25 gr. cacao
- Bizcochos de soletilla
- 15 ml. licor de Amaretto
- Una pizca de sal
Elaboración paso a paso
- Añadimos los pistachos y 50 gr de azúcar al procesador de alimentos con las cuchillas y trituramos hasta que quede muy picadito. Reservamos.
- Preparamos un merengue, para ello vamos a montar las claras a punto de nieve con una pizca de sal. Colocamos las varillas añadimos las 2 claras a temperatura ambiente y la pizca de sal, y a velocidad progresiva de 1 a 6 hasta alcanzar la velocidad máxima donde dejaremos 3 a 4 minutos hasta que se monten las claras. El tiempo dependerá de lo frías que estén las claras. Reservamos en un bol con cuidado de no manipular mucho para no perder el aire.
- Sin limpiar el bol. Añadimos las yemas y el azúcar que nos queda y montamos en velocidad progresiva hasta velocidad máxima 2 minutos.
- Echamos los pistachos y azúcar picadito del procesador de alimentos que teníamos reservado y mezclamos 2 min. en velocidad 5.
- Añadimos el queso mascarpone y el licor y programamos 1 minuto más en velocidad 5.
- Mientras en los vasitos donde vamos a preparar nuestro tiramisú, colocamos los bizcochos cubriendo todo el fondo y regando con el café frío, tienen que quedar un poco empapados.
- Añadimos las claras montadas a la crema y mezclamos con una espátula de manera envolvente suavemente hasta que quede todo integrado. Introducimos la crema en una manga pastelera.
- Encima de los bizcochos que teníamos en los vasitos añadimos una capa de crema después otra de bizcochos que volveremos a mojar de café y finalizaremos con la crema.
- Para terminar espolvoreamos el cacao con la ayuda de un colador para que no queden grumillos y dejaremos en la nevera para que enfríe. Decoramos con pistachos por encima.
Notas de la Receta
- Yo lo hago de un día para otro, queda más rico.
- También lo podéis hacer en una fuente.
Espero que os guste.
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